Te dispones a hacer una fotografía y lo primero que sueles hacer es buscar un lugar. Por los motivos que consideres ya lo has encontrado así que pones a tus modelos. Colocas su cabeza, le das algo que hacer a sus manos o simplemente las escondes, terminas de estirar bien la ropa y diriges sus miradas a un lugar en concreto. Les pides que interactuen o simplemente les indicas que se mantengan quietos. Haces la foto y ves que algo falla. No termina de estar perfilada. Se la enseñas, principalmente a tu modelo . . .